EL CIELO... EN EL INFIERNO 9


Demian estaba perplejo de lo que sus ojos veían, aquella imagen solo permaneció unos segundos ante sus ojos y se desvaneció en cuestión de segundos pero fue tan nítida que sería difícil borrarla se su memoria. Anniemarie, se aproximó a la puerta y camino a su lado como si nada pasara. Cuando estaba por terminar la escalera, un ruido metálico rompió el silencio y la puerta inferior se abrió, el sacerdote Karl irrumpió en las escalas y con un grito exclamo:

- ¡Llevamos horas buscándolos! ¿Qué estaban haciendo ahí?
- Nada, solo conversábamos - Respondió Demian, con un tono frío y seco.
- ¡Tú! ve a descansar con tus amigos, ellos te dirán cuáles son tus responsabilidades mañana - le dijo el sacerdote Karl a Anniemarie, mientras la tomaba del hombro. Ella inclino la cabeza con culpabilidad y cruzo la puerta hacia el garaje donde la esperaban Dereck y Paul.
- Tú y yo tenemos que hablar, espérame en el comedor antes de ir a dormir con ellos - le ordeno el sacerdote Karl  a Demian mientras este salía por el garaje.

En la habitación que Anniemarie compartía con los chicos y con Demian, el silencio reinaba, se prepararon para ir a la cama y le entregaron a ella las responsabilidades que tenía para el siguiente día. En parte ellos no sabían ni que decirle, pensaban que ella estaba enojada con ellos, y ella permanecía en silencio, sabía que ellos no le dirían nada sobre todo Dereck, quien estaba dispuesto a callar todo, aun si se trataba de ella.

Anniemarie, siempre ha disfrutado de preparar liturgia, así que mientras leía los documentos que Dereck y Paul le entregaron se imaginaba en la cabeza lo que debía hacer, pensaba en si necesitaba un maestro de ceremonia o si buscaba un joven para cada lectura. Anniemarie seguía concentrada en su preparación, Dereck se había recostado en su cama silenciosamente y Paul observaba a Anniemarie desde un rincón de la habitación, no sabía que decirle, pensaba que aún estaba enojada, puesto que en su última conversación ella se había marchado con cierto sinsabor.

- ¿Podemos hablar?- le pregunto Paul suavemente por la espalda.
- ¿De qué quieres que hablemos? - respondió ella, aun concentrada en sus papeles.
- ¿Estas enojada?
- No, ¿debería estarlo?
- Lo pareces...
- Pues no es así... lo que creo es que ustedes están un poco extraños y yo quisiera una explicación.
- Estamos preocupados por ti.
- ¿Preocupados por mí? -le pregunto ella en un tono irónico y dejando los papeles que estudiaba sobre su regazo.
- Sí.
- ¿Y eso porque? ¿Sera por lo que paso la primera noche en el templo?
- Ah! pues si... pero...
- ¿Hay algo más?
- Pues...
- ¡No le digas! - interrumpió Dereck desde atrás, con un tono seco y fuerte.
- ¿Qué no debe decirme?
- Annie... quiero que entiendas que intento protegerte, nadie más ha visto lo que yo y necesitamos ayuda antes de hacer cualquier cosa.
- Creo que si se trata de mi deberías decirme ahora mismo... o al menos contarme lo que ha...
La tensa conversación fue interrumpida por Demian quien entro a la habitación con el rostro iracundo ante lo cual Paul le pregunto:
- ¿Qué paso?
- Nada, me incomodan y exaspera que juzguen a las personas premeditadamente. Dereck necesito hablar contigo afuera, ahora mismo. - Dijo en tono autoritario y salió al patrio, Dereck salió tras él, con una manta encima y dejaron a Paul y Anniemarie solos en la habitación.
- Ya sé que no me dirás nada porque le temes más a Dereck que a mí. O tal vez lo quieres más a él.
- No es temor Annie, es solo que Dereck y yo hemos visto cosas... y estamos muy preocupado por ti.
- ¿Qué cosas?... le interrumpió Anniemarie.
- Dereck y yo estamos buscando ayuda. Annie... no sé cómo explicarte que cosas.
- Ustedes están muy raros.
- Paul, ven por favor. - le interrumpió la voz de Demian desde afuera. Paul salió y Anniemarie quedo sola en la habitación, extrañamente no se sintió sola, algo o alguien la abrigaba y la acompañaba.

A fuera la voz de Demian se oía preocupada y les preguntaba sobre todo lo que había pasado en los últimos días, trataba de entender lo que pasaba, Demian aún estaba asustado o más bien preocupado y perplejo por lo que había visto hacia un par de horas. Dereck y Paul parecían niños regañados parados contra la matera que estaba en el lado de la puerta del salón donde estaban durmiendo

-... por favor no sigan guardando silencio si saben algo díganlo, a Anniemarie le pasa algo y podría ser grave, ella necesita su ayuda, ustedes son sus amigos ¿Qué acaso no la quieren?
- La queremos - respondieron los dos al unísono.
- Entonces ayúdenme... - les suplico Demian.
- ¿Pero el sacerdote? - pregunto Paul
- Por ahora no hablaremos con él... no sé si sea apropiado confiar en él. Por ahora necesito que confíen en mí que me cuenten ¿Qué es lo que pasa?
- Annie esta poseída... - afirmo Dereck - Yo lo he visto, y tal vez sea mi culpa.
- No, Ella no está poseída. A ti todos te parecemos poseídos.- replico Paul iracundo.
- Chicos no necesito discusiones - intervino Demian - Dereck ¿Por qué dices eso?
- Porque así es, yo lo he visto, ella presenta varios síntomas de una posesión. La levitación que vimos en el templo es el más evidente síntoma, le tiene aversión a la oración, la amnesia que sufre frente a los episodios, y su aparente ignorancia ante todo el asunto.
- Eso no dice nada - respondió Paul. -Tú ya sabes que a ella no le gusta orar como a los otros y menos como oran los de tus grupos.
- Es cierto Dereck esos síntomas hay que investigarlos a fondo, no se puede concluir premeditadamente.
- Entonces debemos investigar. Hacerle pruebas.
- Chicos si el Sacedorte Karl nos ve haciéndole pruebas a Anniemarie nos hará aún más preguntas. Y ni ustedes ni yo confiamos en él. Entonces necesito su ayuda, primero necesito que me cuenten todo lo que sepan y les haya sucedió extraño con ella, segundo que no la dejen sola y tercero que mañana me ayuden a hacerle las pruebas, yo preparare todo a primera hora, Ella no debe darse cuenta, así que debemos planearlo bien, por ahora vamos todos a dormir antes que el sacerdote vuelva y nos vea aquí, mañana tendremos una larga conversación. Dereck te necesito despierto a primera hora. Paul tu estarás con ella todo el tiempo.
- Y  las pruebas, cuando se las haremos.- Pregunto Dereck.
- Mañana en la mañana. Necesito de su ayuda para ello. Entonces vamos a dormir.

Aquella noche paso sin sobre saltos, Anniemarie durmió plácidamente, Paul tenia cierto enojo con Dereck y este último aun pensaba que el suceso en la casa cercana a la Paul había sido la causa. Aunque también pensaba que algo venía desde antes pues ella tenía comportamientos extraños mucho antes del suceso de la casa. Dereck se la pasó pensando durante un buen rato en la noche, algo dentro él le decía que no era necesario hacerle pruebas, puesto que ya las tenía, que debían actuar, pronto.

En la mañana Demian y Dereck fueron los primeros en levantarse, salieron silenciosamente de la habitación y dejaron a Paul y Anniemarie dormidos. El seminarista acompaño a otro sacerdote en la eucaristía de la mañana y hablo durante un buen rato con él. Envió a Dereck a ayudar con la organización de la eucaristía y se quedó en el altar, preparo varias cosas sobre la mesa del altar y las cubrió con el mantel. Se tardó una hora en ello y pidió no ser interrumpido, cuando Dereck llego no vio nada, aparentemente....

- ¿Y dónde están las pruebas? - le pregunto Dereck a Demian
- Ya lo sabrás, busca a Paul, necesito que el también reciba las instrucciones.
Dereck salió del templo corriendo y volvió del mismo modo trayendo a Paul tras él.
- ¿Dónde está ella? - pregunto Demian.
- Esta en el baño arreglándose.
- Perfecto...
- Paul, Dereck... las pruebas están listas, todas están en el altar, así que por favor eviten pasar por estos lugares para no adulterar las pruebas - les señalaba ciertos lugares en el altar que debían evitar.
- ¿Que pruebas son?  - insistía Dereck
- Es mejor que no lo sepas, pero tú te darás cuenta inmediatamente si algo sucede. Por favor estén muy atentos, y asegúrense de que Anniemarie permanezca aquí carca del altar, observen bien su comportamiento y reacciones, cualquier detalle es importante.
- ¿En qué momento lo haremos? ¿La traeremos acá sola?
- No, supongo que Anniemarie querrá hacer un ensayo con los chicos de la liturgia, ese es el momento de hacer las pruebas, debemos tratar de estar los tres, de lo contrario al menos uno de nosotros y observadores que serán los chicos de la liturgia.
- ¿Qué se supone que haremos? -pregunto Paul
- Nada, traten de estar lo más tranquilos posible, trabajen con ella, ayúdenle, que no note lo de las pruebas. Ahora vuelvan a sus cosas, yo cerrare el templo y me cerciorare de que nadie entre, antes de ella.

Los chicos salieron, Paul parecía meditabundo y Dereck frustrado, aun así continuaron con sus deberes, Dereck fue llamado a coordinar un grupo de jóvenes, los primeros en llegar. Anniemarie se encontró con Paul y mientras le contaba lo que había planeado en la noche, este estaba distraído, se preguntaba qué pasaría cuando Anniemarie se enfrentara a las pruebas, cuando ella se dio cuenta de su distracción se enojó un poco y salió a buscar a los jóvenes que necesitaba para la liturgia. Sabía que conseguir jóvenes que no les diera pena leer y salir frente al público era difícil. Pero estaba decidida a conseguir, una pareja para maestros de ceremonia, tres para realizar las lecturas, dos para las peticiones, y cinco más para llevar las ofrendas. Los de las ofrendas fueron más fáciles, del primer grupo salieron varios. Para que no sospechara su distracción Paul trajo cuatro jóvenes de otros grupos, hasta el momento faltaban tres jóvenes más, en los cálculos de Anniemarie. Paul le pidió a Dereck que consiguiera los tres jóvenes faltantes y él se fue para la sacristía con Anniemarie y los nueve jóvenes.

Anniemarie pregunto a los jóvenes quienes querían leer y se concentró en ellos, ya que no le gustaban lecturas tartamudeadas o mal hechas. Los puso a leer uno a uno, los escuchaba con atención, y les indicaba las pausas, luego de unos 15 minutos, el seminarista Demian entro en la sacristía a toda velocidad acompañado por tres jóvenes, se sorprendió de que todos aun estuvieran en la sacristía, dejo a los jóvenes con Anniemarie, se acercó a Paul y le pregunto al oído:

- ¿Ya?
- No, ella quiere que ellos hagan bien las lecturas. Hemos estado aquí todo el rato.
- Vamos a presionarla para hacerlo ahora mismo, no tenemos mucho tiempo.

Demian, abrió la puerta que da al templo y dijo:

- Jóvenes, vamos al templo necesitamos ensayar los lugares, nos queda poco tiempo. Anniemarie, tu les explicas como se ubican en el altar yo les digo donde sentarse y los tiempos.

Anniemarie asintió y salió con los jóvenes hacia el templo, en la puerta de la sacristía Paul separo a los jóvenes de Anniemarie y los guio hacia donde estaba Demian por la salida lateral del altar, desde la mitad del templo Demian dijo:

- Anniemarie, Ubícate por favor en el altar para que los orientes. Vamos a hacer esto solo 3 veces la primera lenta y bien explicada, la segunda solo con marcadores y la tercera ustedes solos como si nosotros no estuviéramos. Annie, liturgia solemne, los maestros de ceremonia entran detrás de los ciriales. ¿Listo?
- Listo.

Cuando ella respondió, ya estaba ubicada frente a la mesa en frente del altar, Paul la observaba detenidamente desde un lateral del templo, hasta ahora parecía que nada le incomodaba, nada raro sucedía, entonces empezó el ensayo. Los dos jóvenes maestros de ceremonia subieron como Demian les indico, Anniemarie los esperaba arriba en el altar, les indico hasta donde subir, como hacer la reverencia ante el altar y los ubico a lado y lado del altar. Demian hacía de marcador desde abajo.

- Anniemarie, por favor haz las veces de sacerdote para indicarles en que momento iniciar la lectura.
- Miren de forma lateral al sacerdote y comuníquense entre ustedes- dijo Anniemarie mientras se ubicaba en la sede, el lugar donde el sacerdote debía sentarse.

Cuando estaba allí parada, Demian la vio tambalear un poco, le hicieron la indicación a los jóvenes y estos empezaron a leer. Al terminar Anniemarie les dijo donde debían ubicarse. Se acercó a la mesa del altar y dejo sobre ella las hojas que tenía en la mano y comenzó a ubicar a los jóvenes que harían la lectura de la Palabra y regreso junto a mesa, escucho las lecturas de los jóvenes y las seguía en su mente entonces Paul noto la fijación de su mano sobre la superficie de la mesa, su mano iba y venía sobre el mantel que la cubría. En el momento en que las lecturas terminaron Anniemarie se giró y les indico por donde salir del altar, Demian los recibió abajo para ubicarlos en sus asientos. Por un instante sus ojos se fijaron en Anniemarie, entonces vio de nuevo aquella cadena, que había escuchado en el cementerio y que le había parecido ver brillar en la oscuridad de la terraza, pero esta vez, no se ocultaba la veía clara descender por la pierna izquierda de Anniemarie y perderse en el suelo. Demian le indico a Paul que mirara a Anniemarie, pero este no entendía que era  lo que debía ver.

La misteriosa y brillante cadena desapareció cuando Anniemarie se movió hacia el frente para recibir a los jóvenes que leerían las peticiones, para ese momento los jóvenes estarían de rodillas en el altar, y los maestros de ceremonia en los atriles a lado y lado del altar, ellos proporcionarían el micrófono para los jóvenes, Anniemarie les indicaba donde ubicarse y en qué momento intervenir...

-Annie, por favor arrodíllate detrás de ellos. - le dijo Demian desde las bancas.
Anniemarie obedeció y se arrodillo detrás de los jóvenes. Demian la miraba fijamente, esperando que algo pasara con Anniemarie, pero ella parecía estar tranquila pero algo le incomodaba y ella miraba el piso buscando que era lo que le incomodaba. Demian intervino diciéndole:

- Tranquila Anniemarie, es solo agua. En la madrugada se han regado los floreros para que las flores no se marchiten. - Todo hacia parte del plan para que Anniemarie pasara por las pruebas.

Cuando estos jóvenes terminaron su parte, y Anniemarie les indico, por donde debían descender del altar y se quedó sentada allí. Seguían las ofrendas, los jóvenes ya estaban listos para subir al altar, desde su lugar  Anniemarie los iba llamando mientras los otros jóvenes se ubicaban en los atriles para leer los apartes para presentar cada ofrenda.

- En este parte Anniemarie, hará las veces de el sacerdote, por favor ubícate al lado derecho del altar y vas recibiendo las ofrendas, chicos... suben de uno en uno, por favor conserven sus espacios, los que les voy dando, suben se ubican en el centro del altar, exponen la ofrenda, no la suban mucho, la elevan a la altura de su rostro y cuando termine la lectura bajan la ofrenda, giran y se la entregan al sacerdote.

Anniemarie se ubicó como Demian le pidió y los jóvenes de las ofrendas hicieron lo indicado. Cuando Demnian termino de ubicar a los jóvenes que subirían las ofrendas dio la vuelta por un lateral del altar y se ubicó al lado de Anniemarie, estaba ansioso de ver como ella recibía las ofrendas, pues allí estaban las que él consideraba las pruebas más importantes. El repertorio iba, desde incienso hasta sal y agua exorcizada, pero ante ninguno ella mostro alguna señal de aversión, al contrario parecía tolerarlos e incluso Deiman vio cuando inhalaba el incienso inocentemente. Demian estaba decidido a encontrar una respuesta de si Anniemarie estaba en realidad poseída, como lo pensaba el sacerdote. Entonces recordó que cuando entro al seminario había escuchado de un caso de posesión en que la persona no mostro ningún signo hasta que bebió agua bendita, entonces el intentaría hacer lo mismo con ella.

La entrega de las ofrendas termino y Anniemarie, no mostraba ni un solo signo de malestar. Demian salió corriendo a la sacristía, mientras los maestros de ceremonia y los encargados de la monición de salida tomaban sus lugres. Cuando Demian regreso los jóvenes ya habían empezado, entonces aprovecho que todos estaban ocupados con Anniemarie y se le acerco a Paul y le pregunto:
- ¿has visto algo raro?
- No, ¿y tú?
- Solo un par de cosas que me dejan pensativo pero nada relevante. Necesito que hagas que Anniemarie beba esto.
- ¿Qué es?
- No importa, necesito que se lo tome.
- ¿Todo?
- Aunque sea un sorbo. ¡Ve!

Paul obedeció con varias dudas en su cabeza, aun así hizo lo que Demian le pedía. Se le acerco a Anniemarie y le ayudaba con el guion, trato de parecer lo más natural que fuera posible al pedirle que bebiera...
- ¿quieres? - dijo Paul y le tendió el vaso que le había entregado Demian. - para refrescar la garganta.
Sonaba raro, y más aun considerando que aún era de mañana y el día estaba fresco... Ella lo miro extrañada y le sonrió con cara de "¿Qué estupidez estas diciendo?" Aun así, tomo el vaso y se dispuso a beber un sorbo.

Cuando Demian la vio sujetar el vaso con sus manos, ignoro todo lo demás por completo y se concentró solo en ella... quería ver cada gesto y cada reacción, ella se dispuso a beber, inclino el vaso sobre sus labios y le dio un sorbo.

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